-El cigarro te va a matar.- escuchó una voz familiar, mientras sentía como le arrebataban el cigarrillo de la boca y lo aventaban al suelo.
-¿Kaito? ¿Qué haces aquí?-.
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"Todos tenemos un destino. Y el mío es casarme con el".
Esas palabras retumbaban violentamente en la mente de Kaito.
El siempre había estado enamorado de aquella chica, la consideraba perfecta.
Perfectos sus defectos y perfectas sus virtudes. El sólo quería una vida con ella.
Kaito sabía que ella amaba a alguien más, pero se aferraba desesperadamente a la idea de estar com ella sin importar qué.
Kaito estaba más que enamorado de la hermosa joven CV01, Hatsune Miku.
-Estoy escribiendo una nueva canción...- dijo la joven con cierto pesar.
-¿Y qué te tiene tan preocupada?-
-Que es un dueto.-
-¿Sólo por eso? Sabes que los duetos se te dan muy bien.- dijo Kaito en tono reconfortante
-Es que es con Mikuo...-
-Sigo sin entender tu preocupación.- dijo confundido.
-No sé si quiera hacer este dueto conmigo. La última vez que nos vimos, me dijo que quería cancelar el compromiso. Yo se que ama a alguien más.- y rompió a llorar.
-Espera... ¿Te vas a casar? ¡¿Con Mikuo?! ¡Pero es tu hermano!-
-La familia Hatsune es de las más antiguas de todas, y todos nuestros antepasados se han casado entre hermanos. Nuestro matrimonio fue planeado desde antes de nacer, y yo lo amo.-
-Tu sabes que está enamorado de alguien más... ¡¿Por qué vives torturándote con un amor unilateral?!
Pero supongo que no tengo el derecho de reclamarle nada, porque yo me torturo igual...- dijo rendido. Sintió el aire escapar.
Miku levantó la cara, y limpiándose las lágrimas que escurría por su cara, preguntó temerosa:
-¿Qué estás diciéndome? Tu no puedes... estar enamorado de mi.-
-¿Y qué si lo estoy? Tu nunca me querrás como lo quieres a el. Pero yo si lo haré para siempre, te querré hasta que ya no me quede un soplo de aire.-
-Escuchame, Kaito... Todos tenemos un destino. Y el mío es casarme con el. Permanecer a su lado aunque no me vea más que como su hermana.
Mi deber es quedarme con el... hasta el final.-
Kaito palideció ante las tristes pero seguras palabras de Miku. Sabía que ya no había vuelta atrás, su relación nunca se iba a recuperar de eso, en especial porque el dolor de saber que Miku nunca iba a estar con el... era simplemente más de lo que Kaito podía soportar.
-Siento mucho los inconvenientes, Miku. Esta es mi despedida, y espero que Mikuo se de cuenta de la hermosa mujer que tiene a su lado.-
-Kaito, no te vayas.- dijo Miku llorando.
-Perdona, pero ya no... ¡No puedo más!- y salió corriendo.
Se detuvo en un callejón, se recargó sobre un poste, y comenzó a llorar frenéticamente. Casi ni podía estar de pie, las rodillas le temblaban y sentía que la fuerza que tenía se iba rápidamente.
Pero sabía que no era bueno estar llorando, en un callejón a las dos de la mañana. Así que se dirigió a su departamento.
Casi nadie sabía (salvo Miku) donde vivía, ya que todos los demás Vocaloid vivían relativamente cerca unos de otros. Sólo el vivía alejado de los demás, y Akaito, que el simplemente vivía en la ciudad contigua. Con la excusa de que no quería vivir cerca de "perdedores". Kaito sabía perfectamente que era porque Rin no quiso ser su novia, pero aún así le pareció que sólo estaba emberrinchado con la jovencita Kagamine.
Mientras caminaba, todavía con los ojos semi-húmedos, vio un rostro familiar. Sentado en la acera a media calle, no tenía una cara muy diferente a la propia.
Kamui Gakupo se veía igual o hasta más destrozado que el.
El joven samurai tenía un cigarrillo encendido entre los dedos, con la cabeza gacha.
Caminó hacia el, y le arrebató el cigarrillo mientras lo tiraba al piso.
-El cigarro te va a matar.- dijo algo molesto.
-¿Kaito? ¿Qué haces aquí?- preguntó Gakupo, con la voz quebrada.
-Voy a mi departamento- dijo mientras se sentaba a un lado del samurai. -¿Tu no estás muy lejos de casa?-
-Ya no es mi casa...- dijo pesadamente.
-Si te peleaste con Luka, creo que estás exagerando. Lo mismo que hizo Akaito. Todo un drama porque Rin...-
-¡Ya me sé esa historia!- interrumpió violentamente a Kaito. -Pero no estás tan equivocado... si tuve un conflicto muy grave con Luka, y no creo que volvamos a estar juntos nunca.-
-¿Tan malo fue?-
-Terrible... me ha estado engañando.-
-Lo siento mucho, hermano.- dijo Kaito apenado.
De repente pensó que entonces su situación no estaba tan mal. Miku lo había rechazado, y ya. A Gakupo lo habían hecho creer que era querido, para después hacerlo pedazos.
-No importa ya...- dijo rendido el samurai.
-Oye, ¿Tienes a dónde ir?-
-La verdad, mañana después del ensayo con Len, iba a empezar a buscar un lugar. Por hoy, supongo que voy a pasar la noche en un hotel. Pero me perdí, sólo estuve caminando sin prestar atención a donde iba y llegué aquí... ¿Me puedes decir en dónde me puedo quedar?-
-Si quieres, puedes venir a mi casa y pasar la noche ahí. Queda a 10 minutos caminando.-
-Sería genial, gracias. Mañana empezaré a buscar un lugar para vivir... ¿Podrías darme asilo por lo menos una semana?-
-¡Claro, amigo! Será genial tener un poco de compañía- dijo feliz.
Se levantaron del frío suelo, y emprendieron la marcha hacia el departamento del Kaito.
Gakupo y el siempre habían sido buenos amigos.
Se conocieron cuando el samurai hizo su debut en la familia de Vocaloid2.
Cuando lo escuchó cantar, supo que tenía que hacer un dueto con él. Así hizo una versión de una canción de Miku y Luka..
Sin duda, superar a la joven Hatsune le iba a llevar algo de tiempo.
Cuando hicieron aquella versión de "Magnet", a cierto CV02 le llamó la atención lo bien que sonaban juntos.
Así que les hizo una oferta, hacer una serie de canciones llamado SCL Project.
De pronto Gakupo, Kaito & Len eran los más solicitados Vocaloid.
Y pasando tanto tiempo juntos, Kaito y Gakupo se conocieron hasta el más mínimo detalle, haciéndose los mejores amigos.
Kaito sabía que el samurai se aferraba al cariño de Luka, sin saber si era amor lo que sentía. Y Gakupo sabía lo perdida e incondicionalmente que Kaito estaba enamorado de Miku.
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